La terapia unique o grupal puede ser muy beneficiosa para reducir la ansiedad y aprender habilidades de afrontamiento efectivas. Considera la posibilidad de participar en terapia para recibir apoyo y orientación en tu proceso de liberación de la ansiedad.
Pero, esto no se hace con un hilo dental literal, sino que se basa en la estimulación bilateral y en el uso de sonidos específicos que ayudan al cerebro a dejar de estar tan acelerado y a recuperar la calma.
Pero cuando la ansiedad interfiere en nuestro día a día ya que la experimentamos de manera intensa y frecuente, es importante empezar a trabajar para acabar con ella. Entonces, ¿Cómo podemos parar un ataque de ansiedad?
Hay que escuchar por varios segundos o minutos, respirar, soltar el cuerpo, cerrar los ojos y concentrarte en la música que estás escuchando, para volver a tu trabajo o actividades una vez que te sientas relajado.
Cuando la ansiedad aparece, existen diversas técnicas y hábitos diarios que pueden ayudarte a controlarla y mantener un estado de calma.
¿Te gustaría descubrir técnicas para lidiar con la ansiedad en el momento exacto en que aparece? Sigue leyendo y descubre formas prácticas y psicológicas que te ayudarán a encontrar la calma en medio de la tormenta.
Las bebidas energizantes contienen altas cantidades de cafeína y otros estimulantes que pueden aumentar los niveles de ansiedad. Limita el consumo de estas bebidas y opta por opciones más saludables, como agua o infusiones de hierbas.
Este enfoque lúdico le dio a Sofía suficiente distancia emocional para desafiar su miedo. Las reuniones se volvieron more info menos intimidantes a medida que se recordaba a sí misma que sus pensamientos no eran hechos.
Atención plena o mindfulness: concéntrate en el presente para evitar que la mente divague hacia pensamientos ansiosos o de preocupación.
Consiste en enfocar la atención en el momento presente, sin juzgar los pensamientos o emociones que surjan. Puedes comenzar con solo unos minutos al día y gradualmente aumentar la duración de la práctica.
Un terapeuta o psicólogo puede ayudarte a identificar las causas subyacentes de tu ansiedad y brindarte herramientas y estrategias para manejarla de manera efectiva.
Realiza un ejercicio de respiración: La respiración suele acelerarse ante la ansiedad. Por este motivo una de las estrategias que puedes hacer en caso de un ataque de ansiedad es precisamente intentar realizar un ejercicio de respiración lenta.
Relajación muscular progresiva: tensa y relaja diferentes grupos musculares, empezando por los pies y terminando en la cabeza, para liberar la tensión acumulada en el cuerpo.
Los beneficios son mayores cuando haces ejercicio regularmente. Las personas que se ejercitan regularmente tienen menos probabilidad de experimentar ansiedad que aquellas que no lo hacen.